TORRIJAS

Dificultad 😐 Tiempo 30 minutos

Es un postre típico de Semana Santa aunque yo hay veces que si tengo pan de sobra las hago y me doy un homenaje. Se pueden disfrutar en cualquier época del año.

No son complicadas de hacer, lo principal es que el pan sea el adecuado para hacerlas. Tiene que ser un pan que la miga sea densa, que no tenga burbujas ni esté hueco y que sea del día anterior o de dos días.

Vamos a necesitar 1/2 ltr. de leche, 2 huevos, una rama de canela, corteza de limón, azúcar y , por supuesto, el pan.

Pondremos a calentar la leche, le añadimos la rama de canela, un par de rodajas de corteza de limón y dos cucharadas soperas de azúcar. En el momento que rompa a hervir lo apagamos. Para que la leche coja bien el sabor dejaremos reposar unos  10 minutos.

Mientras cortaremos el pan en rebanadas de 1-1'5 cm. Para 1/2 ltr de leche yo he cortado 8 rebanadas.

  

En una fuente profunda echaremos la leche pasada por el colador para que no caiga ningún trozo de canela ni limón. 

Iremos colocando las rebanadas de pan y dejaremos que absorban bien la leche durante un par de minutos por cada lado.

Mientras tendremos aceite de girasol caliente en una sartén. Hay que tener cuidado y que no esté demasiado caliente para que no se quemen y queden con un color doradito.

Batiremos los dos huevos y pasaremos las rebanadas de pan con cuidado de que no se partan y quitando el huevo sobrante para que no se haga demasiada "puntilla".

Iremos añadiendo el pan y lo freiremos durante un par de minutos por cada lado. 

Hay que tener un plato preparado con papel absorbente y quitarles bien el aceite sobrante.

En una fuente espolvoreamos azúcar y las vamos colocando. 

Ahora solo nos queda echarles un poco más de azúcar por encima y tenemos nuestras torrijas listas para disfrutarlas.También podéis ponerles un poco de canela en polvo. 

Son estupendas para desayunar o para merendar y mucho más sanas que la bollería industrial.